La idea de la vida universitaria surge con esta universidad en mí vida, un lugar muy influyente, un campus, una ciudad, hoy en día solo quedan los recuerdos ya que por las distintas circunstancias nunca pude concentrarme en aprobar materias. Quise regresar en varias oportunidades. El lugar, el viaje, las aulas las calles internas, los ladrillos, la biblioteca central, los folletos, el centro de estudiantes, el puente peatonal, la dársena para volver a lomas. Era un viaje hermoso que disfrutaba bastante, incluso los sábados. Era otra mística, otras prioridades, otros sueños que fueron opacados y suprimidos. Caí dentro de el gran grupo de la deserción tan marcada en la carrera que ha signado muchas vidas negativamente. Uno se supone que ingresa a una carrera para triunfar y salir recibido, porque se supone que tiene ganas y tiene la voluntad suficiente. Aunque en la educación pública no es así. Está educación se lleva la vida estudiantil de muchísima gente que no lo logra nunca, aún después de 20 años como es mí caso.
Sueños truncados y olvidados que a nadie le importan, pero que se mantiene vivo gracias a que el corazón funciona. El cerebro comprende las razones pero a la conciencia que trasciende no le es suficiente hasta ahora. Ningún logro es logro salvo que sea ese. Pero ese es muy difícil.
El dolor en este punto, es algo que se cuenta para el futuro, es incapacitante, es cruel. Uno no valora la salud cuando la tiene de joven, hora sufre los dobleces de las consecuencias de sus hábitos y de los nervios. Ya me encuentro cruzando el puente peatonal y volveré a la facultad para seguir estudiando y disfrutando de sus lindas calles y lugares que aún no he descubierto. Fue una carrera abandonada pero que dejó un gran recuerdo. Da mucha tristeza, que teniendo el potencial uno tenga que postergar y abandonar. No tuve el apoyo para seguir cuando era joven aún en el 2009 cuando quise volver o en el 2015, volvía para reparar heridas del pasado que ya no sangran pero que están muy presentes, demasiado últimamente, rodan mí cabeza y no me abandonan nunca. Lomas, 25/5/23: mí universidad, aún te pienso, esas tardes en los bancos de piedra, pensando en las materias. Nunca me olvides, hasta siempre, volveré aún si no fuera en esta vida, en esta ya es muy tarde y estoy muy cansado...si regresará no tiene sentido porque lo más valioso ya lo perdí..el tiempo
